Sin duda, el proyecto estrella de la Diputación de Obras Asistenciales es la celebración de las Colonias de Verano. Todos los años, durante diez días en el mes de julio, del 14 al 23, a nuestra Casa de Hermandad del Rocío desplazamos sobre 90 niños de edades comprendidas entre los 4 y 13 años de edad, todos ellos asistidos por 25 monitores voluntarios de nuestra Hermandad.
Estos pequeños proceden de los sectores y barrios más desfavorecidos de la ciudad, como Torreblanca, Pajaritos y 3000 Viviendas. Pertenecen a familias en alto riesgo de pobreza, familias desestructuradas, o con progenitores con problemas de drogadicción. Muchos de estos niños padecen problemas de afección, desarraigo y en algunos casos abandono.
Durante estos días les damos a estos pequeños la oportunidad de convivir entre ellos y con nosotros en un ambiente totalmente distinto al que viven el resto del año. Realizamos con ellos actividades de formación, deportivas, trabajos en equipo, visitas culturales, así como actividades religiosas. A la vez, con dos autobuses que situamos durante todos los días de la estancia en la casa del Rocío, les desplazamos a la playa de Matalascañas donde pasan un rato de ocio, alegría y camaradería entre ellos.
Además, se organizó un “Camino del Rocío” con carretas, Simpecado,… yendo hasta las mismas plantas de la Stma. Virgen del Rocío para de esta forma transmitirles a estos pequeños la devoción rociera.
Como preludio de las Colonias de éste año, 2019, además de la organización y preparativos previos como cada año, la Junta de Gobierno de nuestra Hermandad y en especial, su Diputación de Obras Asistenciales, acordó que sería útil y necesario, la formación de su personal de monitores, auxiliares, personal de cocina y miembros de dicha diputación, que quisieran participar en un curso de RCP Básico y primeros auxilios, con el fin de estar mejor preparados para asistir a los niños de Colonias de éste año.
Dicho curso tuvo lugar el 2 de julio, con la Colaboración del Instituto Hispalense de Pediatría, que aportó el material y el personal necesario para llevarlo a cabo y la Hermandad de San Bernardo que nos prestó sus instalaciones.
Todo esto no sería posible sin la colaboración de todos: el Ejército Español, que monta para tal fin un campamento en nuestras instalaciones del Rocío con todo equipado; un grupo de jóvenes de la Herman- dad que prestan su tiempo y trabajo como monitores y auxiliares; un grupo de hermanos y hermanas, encabezadas por la Diputación de Obras Asistenciales, que trabajan en la organización, las cocinas, la limpieza, las ropas y en todo lo necesario para que no falte de nada.
Además de la colaboración personal, también es necesario un aporte económico importante para cubrir las necesidades, desde los que han apadrinados niños, los que han realizado donaciones monetarias o los que han realizado su ayuda “en especie”.
Gracias a todos aquellos que han colaborado en el éxito
de estas Colonias, hermanos o no, empresas o instituciones
(civiles y religiosas) que han hecho posible
que esto haya sido una realidad, y de forma especial, a los que de forma directa han estado al pie del cañón.